"El extranjero" - Un segundo, dos relatos.
Tras la
primera lectura de "El extranjero", escribí un texto "a bote pronto" que
intentaba retratar la impresión recibida. Hoy, rectificado, poco, lo
comparto con vosotras. ¡Chin, chin!
"A - Música al viento, en volutas que se esparcen, se disgregan...
Eres muy serio, enfadado siempre... oigo a través de sus notas,
Asomado al balcón, gente que sube al tranvía y que vuelven más tarde,
Inútil hablar, no te entenderán, salúdales y sonríe, la vida sigue y no cambiará;
Reverbera en las olas la canícula en todo su esplendor, da igual, solo agobio;
Música al viento, nada más, sol y calor, solo eso es la vida hoy
Vacío en el fondo de sus ojos, no hay nada, da igual, solo dispara;
Y el gatillo percute, jala, tira, dispara, hasta cuatro veces más.
Mi vida no cambiará, solo mis circunstancias.
B - A ver cómo se da hoy
el turno; un no parar, por supuesto. Con estos humanos no hay otra. No
hay forma de coger unas vacaciones decentes, por más formularios que
presento, debidamente cumplimentados, la respuesta siempre es la misma:
«Período de gran actividad, imposible prescindir de sus servicios.» En
fin, la lista es larga y el curro no se hace solo.
El primero es en esta
playa, calor además, empiezo bien. Ahí está el tipo. Tan tranquilo,
abanicándose con calma. Y ahí viene el otro. Tranquilo hombre, sin
problemas, solo dispara y luego dices que fue el sol, por ejemplo. ¡Zas!
Lo cierto es que manejando la guadaña soy la mejor. Una vida al capazo y
a por el alma ya viene el otro, que no es mi campo. Por más solicitudes
que hago para renovar el material no hay manera de soltar la guadaña;
también es cierto que no sé si me reconocería sin ella. ¿Pero qué hace?
Cuatro tiros más, ¡exagerado, si ya te lo cargaste!. En fin, humanos; la
lista hoy es enorme."
José Luis.
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